Biológicamente estamos programados para crecer. De hecho, una película como “El curioso caso de Benjamin Button” (2008) tuvo tanta aceptación debido al proceso inverso que padecía el protagonista. Salvo Button...
Se dice que no somos tan feos como en nuestra fotografía de DNI ni tan guapos como nos ven nuestras madres y abuelas. Sea como fuere y aunque sabemos que...